Desinfección de zonas comunes en una oficina

Podría parecer que hay espacios de trabajo, como las oficinas, dónde la exigencia de limpieza es menor, porque se trata de una actividad que no genera demasiada suciedad, ni se utilizan sustancias o productos potencialmente peligrosos. Sin embargo, eso no quiere decir que no haya que realizar tareas de higiene y mantenimiento más profundas. Sin duda, la desinfección de zonas comunes es una de ellas. Explicamos cómo debe acometerse este asunto desde un servicio profesional de limpieza.

Claves para acometer la desinfección de zonas comunes en oficinas

El objetivo de desinfectar las zonas de uso común en una oficina es el de generar un ambiente de trabajo saludable, eliminando la presencia de bacterias, virus u otros microorganismos. Además, se trata de impedir la posible propagación de enfermedades. Todo ello revierte en un mayor bienestar y mejora la productividad de los empleados. Sin olvidar el impacto en la imagen de la empresa de cara a clientes y público en general.

Pero, ¿a qué nos referimos cuándo hablamos de zonas comunes en la oficina? Pues, el concepto es amplio, más si pensamos en la actual tendencia a diseñar las oficinas como espacios abiertos. En este contexto, prácticamente todas las instalaciones se podrían considerar zonas comunes, porque son compartidas por el conjunto de la plantilla y no hay puestos de trabajo prefijados, a excepción de los despachos privados. En cualquier caso, sobre todo, las tareas de desinfección se centran en:

  • suelos
  • superficies de contacto, especialmente con las manos: escritorios, pomos de puertas, mostradores, interruptores, teléfonos, teclados y sillas.
  • baños y comedor o zona de café, incluyendo platos, tazas, vasos, utensilios de cocina y electrodomésticos.
  • retirada y gestión de residuos.

Es importante que, al planificar la desinfección de zonas comunes se tenga en cuenta la frecuencia con la que se utilizan, dando prioridad a aquellas de uso continuado. Pero, de forma general, la recomendación es que se limpien y desinfecten a diario.

El proceso de desinfección de las zonas comunes de una oficina

Como adelantábamos, la desinfección de zonas comunes requiere de una planificación previa, que tenga en cuenta el uso que se hace de cada zona, cuántas personas trabajan ahí habitualmente y la exposición a focos de suciedad. Además, hay otros aspectos esenciales del proceso, que detallamos a continuación.

1. La elección de los productos utilizados en la desinfección de zonas comunes

Para la limpieza de oficinas se aconseja usar detergentes y productos neutros. Los desinfectantes óptimos son aquellos que tienen una base alcohólica. También es importante usar agua caliente para lavar los utensilios de cocina.

2. Aspirado y desinfección de suelos

Es preferible usar un aspirador antes que barrer los suelos de la oficina, así se evita que el polvo se esparza por el aire y acabe depositándose en el mobiliario. Siempre, además, se debería acabar pasando una mopa de microfibra humedecida con un desinfectante.

3. Superficies del mobiliario

También en este caso, es más adecuado pasar una bayeta humedecida para recoger el polvo. Hay que buscar un detergente o jabón con efecto desinfectante, al menos en aquellas zonas dónde se pasen las manos, pero que respete el material en el que esté fabricado cada mueble.

4. Equipamiento informático

Probablemente, este sea uno de los elementos más delicados y que requieren de mayor cuidado al desinfectar zonas comunes. Pero, la dificultad no implica que se deba dejar de limpiar a diario. Hay que recordar que teclados, ratones y demás dispositivos se usan constantemente en una oficina y por distintas personas.

Un sistema efectivo y práctico es hacer uso de unas toallitas específicas para este tipo de objetos. Hay que tener cuidado con no utilizar paños o bayetas que puedan desprender fibras, que podrían obstruir los equipos. ¡Nunca pulverizar directamente sobre ellos!

5. Papeleras, cubos y retirada de residuos

El vaciado de los contenedores con basura debe ser una tarea diaria en las oficinas e, incluso, más de una vez, si están repletos. Hay que diferenciar entre los distintos tipos de residuos, para evitar el riesgo de contaminación cruzada y para que se pueda reciclar correctamente la basura. Los contenedores tienen que desinfectarse a diario.

La desinfección de zonas comunes en una oficina es una tarea esencial para garantizar la salubridad de las instalaciones. Es esencial usar los productos y técnicas adecuadas, algo que está garantizado con los equipos de profesionales de la limpieza de Alianza Ibérica Servicios Integrales.

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