La desinfección es uno de los procedimientos esenciales que forman parte de la tarea de cualquier servicio de limpieza profesional. Este manual resume las claves de esta actuación.
¿Por qué se debe desinfectar?
Para entender exactamente de qué se habla con el término desinfección, resulta muy clarificador diferenciarlo del concepto de limpieza. Desinfectar es realizar las actuaciones pertinentes para eliminar y destruir agentes patógenos como bacterias, virus, moho o gérmenes.
Es decir, la desinfección forma parte de las tareas de limpieza, es una de las distintas intervenciones que se deben realizar para garantizar que un espacio queda totalmente limpio. Debería desinfectarse cualquier instalación, pero es imprescindible que se acometa este procedimiento en:
- Lugares dedicados a la salud
- Donde haya personas vulnerables, especialmente niños, embarazadas, enfermos o ancianos.
- Zonas de mucho tránsito de público.
- Cuando se trabaje con alimentos o productos destinados al consumo de personas o animales.
Niveles de desinfección
Como se verá posteriormente, no todas las labores de desinfección son iguales. Al igual que ocurre con otros procedimientos de limpieza e higiene de espacios, depende de las circunstancias y de las necesidades se aplica con mayor intensidad y unos protocolos más precisos.
Básicamente, hay dos niveles:
- Bajo: se eliminan la mayor parte de los patógenos, excepto las esporas bacterianas. Estas esporas son estructuras muy resistentes, con la capacidad de quedar en estado latente y, como consecuencia, que las bacterias vuelvan a desarrollarse.
- Alto: Se acaba con todos los gérmenes y bacterias. Además, se erradican la mayoría de las esporas bacterianas.
Manual de la correcta desinfección
La clave para que una desinfección sea eficaz es usar determinados productos y técnicas especiales. Además, no son intercambiables, ni sirven los mismos en todos los casos, ya que se debe tener en cuenta el tipo de agentes patógenos que están presentes en cada espacio o superficie.
1. Desinfección con vapor
Las máquinas que emiten vapor son una de las herramientas más demandadas a los servicios de limpieza profesional en la actualidad. Por su eficacia y, también, porque responden perfectamente a los criterios de sostenibilidad y cuidado de medio ambiente que se exigen hoy.
El vapor es una excelente técnica de desinfección. De hecho, es capaz de eliminar el 99,9% de los agentes patógenos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que este nivel de eficiencia depende de la temperatura que alcance el agua, al menos debe estar en los 100º C.
2. Las máquinas de ozono
Otra manera eficaz y respetuosa de desinfectar superficies. La gran ventaja del ozono es que proporciona unos resultados increíbles y de forma muy rápida. Se recomienda especialmente en zonas donde se producen malos olores, en grandes espacios y cuando haya riesgo de transmisión de enfermedades.
3. Técnica de agua a presión
En principio, este tipo de equipos se reservan para la limpieza por su eficacia para eliminar grandes acumulaciones de suciedad incrustadas y de difícil acceso.
Sin embargo, si se quiere aplicar para la desinfección, es imprescindible que se acompañe del uso de detergentes con capacidad desinfectante. Realmente, los detergentes son la forma tradicional de desinfectar, aunque tienen dos inconvenientes, su potencial tóxico y contaminante y que no son eficaces frente a los patógenos más resistentes.
4. La técnica del doble cubo
Hemos dejado para el final, la técnica de desinfección más simple y más tradicional. El uso de fregonas es la manera clásica en la que se desinfectaban los suelos y superficies. De nuevo, como en el apartado anterior, la mayor parte de su eficacia va a depender del uso de un producto químico adecuado.
Pero, además, para desinfectar es importante hacer este fregado con lo que se conoce como el método de los dos cubos:
El primer cubo contiene la solución de agua y detergente. Ahí se humedece la mopa industrial o fregona y se pasa por el suelo.
El segundo cubo solo tiene una pequeña cantidad de agua. Se usa para depositar el agua sucia y los restos después de haber pasado por el suelo.
La desinfección es una parte esencial de la limpieza, que afecta directamente a la salud y prevención de enfermedades. Las técnicas y desinfectantes han evolucionado y, en la actualidad, además de eficacia, responden a criterios ecológicos. En Alianza Ibérica Servicios Integrales contamos con los procedimientos y protocolos más avanzados.
