Los tipos de suelo que se utilizan van variando con el paso de los años, en función de las tendencias o las nuevas necesidades que vayan apareciendo. En la última década, el vinilo se ha convertido en una de las principales apuestas por sus múltiples ventajas. Sin embargo, como con todos los demás, necesita una serie de tratamientos para mantenerlo en buenas condiciones e incrementar su vida útil. En este artículo, trataremos cómo llevar a cabo la protección de suelos plásticos.
¿Qué son los suelos plásticos y cuáles son sus características?
Los suelos plásticos, también son conocidos como suelos vinílicos o suelos de vinilo, son aquellos que están fabricados con materiales plásticos. En concreto, se trata del vinilo o PVC, cuyas siglas significan policloruro de vinilo.
El ejemplo más común son las lamas de vinilo, que son láminas delgadas y flexibles que se instalan como un revestimiento en el suelo. La apariencia más habitual es aquella que imita a la madera, la cerámica, la piedra u otros materiales naturales.
La ventaja más destacada frente a estos es que al presentar revestimientos fabricados con materiales plásticos de alta calidad, resultan más resistentes y flexibles que las superficies tradicionales. Además, destacan por su durabilidad, impermeabilidad y facilidad para la limpieza y el mantenimiento general.
Por otra parte, al ser polímeros resistentes, los suelos plásticos son capaces de resistir desgastes y abrasiones, tanto en el interior como en el exterior. Debido a ello, se han convertido en la principal apuesta en aquellos entornos con alto tráfico.
¿En qué espacios se utilizan los suelos plásticos?
La versatilidad de los suelos plásticos ha llevado a su aplicación en una amplia variedad de entornos. Desde ferias y eventos al aire libre hasta instalaciones agrícolas y naves industriales. También son frecuentes en las salas de actividades dirigidas de los gimnasios y en espacios comerciales.
Su colocación es muy sencilla y mucho más rápida y económica que suelos como los de cerámica o la madera natural. Sin embargo, el hecho de que se empleen en espacios de cara al público y donde hay mucho tránsito, hace que la protección de los suelos plásticos se convierta en una prioridad.
No solo es necesario que se mantengan en buen estado para seguir cumpliendo con su función. Sino que además su aspecto va a determinar la imagen que dé la empresa que hace uso de ellos. Por esta razón, a continuación procedemos a explicar cómo se realiza el mantenimiento y la protección de los suelos plásticos.
Tratamientos para la protección de suelos plásticos
A la hora de determinar cuál es la mejor opción de tratamiento para los suelos plásticos, se recomienda consultar con empresas especializadas en la limpieza y el mantenimiento de este tipo de superficies, como es el caso de Ibérica Servicios Integrales.
El asesoramiento es clave para optar por la mejor solución y conseguir el resultado deseado. Los errores en los productos y máquinas empleadas pueden conducir a un daño irreversible en los suelos. Con esto dicho, los tratamientos para la protección de suelos plásticos más comunes son los siguientes:
Sellado protector
La aplicación de un sellador especializado es la opción más sencilla para proteger este tipo de suelos. Este sellador crea una barrera protectora que ayuda a prevenir la penetración de líquidos y de sustancias corrosivas. Por lo tanto, se encarga de proteger la superficie del suelo.
Junto a esta función impermeabilizante, el sellador puede proporcionar una capa adicional de resistencia contra los rayos UV. En aquellos espacios en los que esté colocado en el exterior o en el interior, pero expuesto a la luz solar a través de ventanas, se previene la decoloración y el deterioro causados por la exposición prolongada.
Programa de limpieza regular
Aunque pueda parecer poco relevante, la limpieza regular es esencial para mantener la apariencia y el rendimiento de los suelos plásticos. La acumulación de suciedad, polvo y otros residuos puede afectar a la textura y a la resistencia del suelo con el tiempo.
Se recomienda el uso de detergentes suaves y no abrasivos para limpiar la superficie, para no dañar el material plástico. También es conveniente la implementación de un programa de limpieza periódico que permita prevenir la proliferación de microorganismos y que lo mantenga siempre en buenas condiciones.
Agentes antideslizantes
Otro tratamiento clave para la protección de suelos plásticos es la aplicación de un agente antideslizante. Estos productos son particularmente interesantes cuando la seguridad es prioritaria, como en eventos públicos o en instalaciones industriales. Su efecto es que la superficie sea antideslizante, pero también previenen el desgaste prematuro causado por la fricción constante.
Si necesita asesoramiento para la protección de suelos plásticos o de cualquier otro material, consulte con Ibérica Soluciones Integrales. Nos especializamos en la limpieza profesional y trabajamos en toda España y Portugal.